sábado, 16 de julio de 2011

Hallar…


Hallar…

Nunca más hallaré quien comprenda mi amor
Pues no habrá otro querer que sepa escuchar
Mi triste canción.
- Albert Craft-

Clavadas se quedaron sobre la arena
Todas las ilusiones que yo tejí,
Pero el viento y el agua borró sus huellas,
Nadie sabrá en la vida lo que escribí.
- Gladys Ureña-


Las velas de los barcos lloran tu ausencia
donde voy a encontrar un amor como tu
que nació al escuchar el ruido del mar bajo el cielo azul.
- Albert Craft-



¡Ven a mí, triste canción que llora desde su interior!
¡y revélame el vasto reino de tu presencia!
¡Revélate a los que escuchan sin decir nada!

Sólo escuchamos lo que el alma reclama.
Enseñale a mi corazón hallarte, para comprender ese agonizado amor.
Enseñale a mi alma a sentir, todas las puertas que te retocan.
No hallaras velas de barcos llorando por su ausencia,
porque estará mi presencia
esperando encontrar ese eco que construye tu amor.

¡Oh luz cósmica!, diariamente observo cómo
pintas el cielo de alimentados colores, y veo cómo
vistes el suelo desnudo con verdes hierbas.
Tú estás presente en la calidez del su sol.

¡Oh sí!, es indudables que tú estás presente
Porque naciste sobre la luz de esos grandes mares,
abrigándote bajo el manto de nuestro cielo azul,
es allí donde escuchó, los tristes llanto de un grande corazón.
- Maileen Torres Rodríguez-
16 de julio 2011

lunes, 11 de julio de 2011

Vacío…


Vacío…

El alma se va detrás de las estrellas que llenaron el vacío del jaguar.
Quizás las pueda alcanzar o quizás vuelvan a mí.
Por: Ariel Heriberto Jiménez


En el centro de mi corazón, tengo un trono místico para ti.
Las lámparas de mis alegrías brillan tenuemente con la esperanza de tu llegada.
Arderán con más luz cuando tú aparezcas y recuerde que existo nunca me fui aunque así tú lo hallas deseado, continuo esperando ese milagro que mi jaguar pueda ver las estrellas que se le esfumaron sin poder decir adiós. Pero así acudas o no a mí, te seguiré esperando hasta que mis lágrimas disuelvan la burda densidad de la materia.

Para complacerte, mis lágrimas perfumadas de amor lavarán tus pies de silencio. El altar de mi alma permanecerá vacío hasta que tu vengas, tocando la puerta de esa alma que dejaste ir.
No hablaré. No te pediré nada. Comprenderé que tú conoces la angustia de mi corazón mientras te espero, porque sé que tu espera algo más, que no soy yo, y ese dolor es mutuo, porque estas sintiendo lo misma que asecha mi corazón.

Tú bien conoces mis plegarias y sabes bien que sólo a ti te amo; ya sea que vengas o no a mí, te esperaré, aunque haya de aguardarte por toda la eternidad.
Tú seguirás siendo ese jaguar que busco de mí, sólo lamento que nuestra edad es diferente y posiblemente tendrás vergüenza de mí. Aun si te amo, aunque ya tu hallas despegado a otro universo olvidándote de mí…

Siempre yo para ti

Por: Maileen Torres Rodríguez
11 de julio de 2011